El barco porta bandera panameña, pero las autoridades alemanas sospechan que se trata de uno de los buques utilizados por Rusia para sortear las sanciones a sus exportaciones de petróleo
El remolcador alemán «Bremen Fighter» ha acudido al rescate del barco parado cerca de la isla germana de Rügen.
Un petrolero de nombre «Eventin» ha quedado a la deriva cerca de la isla alemana de Rügen, en el mar Báltico, con 99.000 toneladas de crudo a bordo. El barco ha sufrido un fallo en el motor por lo que se ha quedado sin poder maniobrar y, por ello, las autoridades germanas han enviado un barco remolcador para intentar acercarlo a puerto antes además de que lleguen tormentas que están previstas para las próximas horas. En todo caso, los tripulantes permanecen en el barco y no han necesitado ser evacuados, según las autoridades alemanas.
El barco, de bandera panameña y 274 metros de largo, había salido de la ciudad rusa de Ust-Luga y se dirigía hacia Egipto. Este tipo de trayectos están bajo sospecha para buena parte de la comunidad internacional, ya que por ejemplo la Unión Europea cree que Rusia utiliza viejos petroleros con banderas de conveniencia para transportar petróleo desde sus puertos en el Báltico hacia Oriente Próximo y sortear así las sanciones internacionales.
Greenpeace incluye al «Eventin» en una lista de barcos que considera que pertenecen a esta «flota en la sombra» de Rusia. La organización ecologista detalla en ese documento que el barco fue construido en 2006 y que presenta ya deficiencias. En esa lista figuran al menos 171 barcos de este estilo que han atravesado el Báltico desde Rusia al menos una vez desde que comenzó la guerra de Ucrania.
La OTAN refuerza su presencia en el Báltico
El gobierno de Finlandia ha confirmado este viernes que la OTAN va a enviar dos barcos al Báltico con la misión de vigilar las infraestructuras submarinas que llevan meses sufriendo roturas cuya responsabilidad apunta hacia Rusia según los países escandinavos y bálticos.
La ministra de Exteriores de Finlandia, Elina Valtonen, ha calificado la decisión de la Alianza Atlántica como un paso «tranquilizador que tendrá un efecto estabilizador, por lo que estamos muy satisfechos».
Finlandia ha sido precisamente la última víctima después de que se rompiera un cable de telecomunicaciones que une a este país con Estonia poco después de que pasara por la zona un barco con bandera de las Islas Cook que el gobierno de Helsinki relaciona también con la «flota en la sombra» de Rusia. De hecho, ese buque permanece ahora mismo bajo investigación en un puerto finlandés.
Hasta que se complete el despliegue de vigilancia de la OTAN, Estonia ha decidido iniciar la vigilancia de los cables submarinos por su cuenta, y ha enviado barcos militares a las zonas en las que están estos nodos de comunicación.
Fuente:cadenaser.com
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