El grupo español de astilleros públicos Navantia ha completado el embarque de los equipos del sistema de propulsión independiente del aire.
El grupo español de astilleros públicos Navantia ha completado el embarque de los equipos del sistema de propulsión independiente del aire (AIP por sus siglas en inglés), basado en tecnología de hidrógeno, en el submarino S83, en un acto de trabajo en el astillero de Cartagena que ha contado con la presencia del director general de armamento y material del Ministerio de Defensa, Almirante Aniceto Rosique Nieto.
Así, según ha indicado la compañía en un comunicado este martes, este paso supone un «hito fundamental» en el Programa S-80, que no tiene precedente en la historia de la construcción naval en España, teniendo en cuenta que dicha tecnología ha sido desarrollada para el Ministerio de Defensa de España.
Este novedoso sistema proporcionará a los submarinos de la Armada Española la capacidad de permanecer largos periodos de tiempo en inmersión, frente a la de unos pocos días de los submarinos convencionales diésel-eléctricos.
Reto del primer nivel
Además, este desarrollo, que ha supuesto un reto de primer nivel para la industria nacional, permite a Navantia ofrecer en los concursos internacionales de construcción de submarinos «unas capacidades únicas«.
En concreto, el Sistema AIP -bautizado comercialmente por la empresa española como BEST por sus siglas en inglés (Tecnología de bioetanol Stealth)- es una planta de producción de energía innovadora que permite recargar las baterías del submarino mientras este se encuentra en inmersión, evitando realizar maniobras de esnórquel periódicas para su recarga donde el buque es detectable y más vulnerable.
Esta planta, según ha informado Navantia, se basa en un proceso de reformado de bioetanol, un combustible renovable obtenido a partir de materias primas de origen vegetal, para producir una corriente rica en hidrógeno con la que se alimenta, junto con oxígeno puro, una pila de combustible para producir electricidad de manera discreta.
Así, a diferencia de los equipos ya operativos en otras Marinas, el AIP del grupo español es un sistema de tercera generación, ya que no requiere portar hidrógeno almacenado a bordo, sino que el propio sistema lo genera cuando es requerido, lo que supone una ventaja táctica y de seguridad, incrementando la autonomía estratégica y la capacidad de disuasión del Ministerio de Defensa.
De esta manera, junto a la «extensa sensorización» del buque, incrementa aún más la seguridad de la dotación y del propio submarino, al tiempo que reduce al mínimo el personal que lo opera.
Los participantes en el evento han tenido la oportunidad de visitar la Sección tres del submarino S-83 Cosme García -que alberga los equipos AIP embarcados, los tanques de oxígeno líquido y bioetanol y los sistemas auxiliares necesarios para su funcionamiento-, comprobando los procedimientos de trabajo y seguridad que se estaban llevando a cabo en esos momentos en la construcción del submarino.
Fuente:huffingtonpost.es
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