En 1962 la compañía naviera Fred. Olsen & Co., con sede en Oslo, firmó los contratos para la construcción de cuatro buques para cargas paletizadas con el astillero de la Empresa Nacional Elcano en Sevilla, para su entrega en 1964 con los nombres de “Bretagne”, “Bastant”, “Brisk” y “Brilliant”. Sin embargo, no llegaron a enarbolar bandera noruega, pues los contratos de construcción fueron rescindidos debido al incumplimiento de los plazos contractuales.

De modo provisional recibieron los nombres “ASTENE 94”, “ASTENE 95”, “ASTENE 96” y “ASTENE 97”, siendo botado este último proa al agua. Por sus especiales características, los cuatro buques resultaron de difícil venta, y después de múltiples gestiones se recibieron ofertas de dos compañías extranjeras y de una española, siendo esta última, Castañer y Ortiz, la que ofreció mejores condiciones. En agosto de 1966, el cuarteto de buques estaba terminado y amarrado en el puerto de Sevilla, siendo entregados en 1967 a su nuevo propietario, en el precio unitario de 67 millones de pesetas.

Se trataba de buques de carga paletizada equipados con un moderno sistema constituido por un ascensor combinado con un equipo de rodillos que, con la ayuda de carretillas eléctricas, movían la carga desde los entrepuentes hasta las cubiertas correspondientes y las posicionaban en el costado y viceversa, a través de dos grandes compuertas en cada costado. Tal equipamiento, sin embargo, fue de poca utilidad en su nueva etapa, empleándose los medios tradicionales de carga y/o descarga.

De 2.334 toneladas brutas, 1.055 toneladas netas y 2.258 toneladas de peso muerto, medían 79,66 m de eslora total –74,60 m de eslora entre perpendiculares–, 14 m de manga, 7,72 m de puntal y 4,50 m de calado. En dos bodegas tenían capacidad para 4.615 metros cúbicos de carga en grano. Eran barcos con una estampa característica, es decir, sentados de popa y alterosos de proa, de modo que cuando soplaban vientos de proa avanzaban poco. Estaban propulsados por un motor Götaverken 520/900 VGS/5, fabricado bajo licencia por Elcano, de 2.500 caballos de potencia sobre un eje, que les daba 12 nudos con buen tiempo.

Un anuncio de 1967 decía “si quieres ser feliz, navega en Castañer y Ortiz”

Cuando enarbolaron bandera española pasaron a llamarse, por el orden citado, “Villablanca”, “Villaverde”, “Villafría” y “Villafranca”. Los armadores tuvieron que buscar tripulaciones y en la prensa de la época apareció un llamativo anuncio que decía “Si quieres ser feliz, navega en Castañer y Ortiz”.

El buque “Villafría” fue el segundo de la serie. Construcción número 95 del astillero sevillano, estaba terminado en diciembre de 1965 y entró en servicio en marzo de 1967 fletado por COFRUNA. Más tarde siguieron fletes por cuenta de Naviera Pinillos y otras navieras, así como frecuentes viajes tramp, hasta que en sus últimos años permaneció al servicio de Naviera Asón en la línea Canarias-Península, llevando plátanos a la subida y carga general y automóviles a la bajada.

El 7 de mayo de 1977, en viaje de Santa Cruz de Tenerife a Málaga, auxilió a los seis tripulantes y un perro del pesquero “Punta Limones”, de la matrícula naval de Las Palmas de Gran Canaria y con base en Arrecife de Lanzarote, que se hundió debido a una vía de agua.

A consecuencia de los frecuentes cambios de criterio de la CREP, en 1982 fue transformado en buque climatizado. Los trabajos se efectuaron en Vigo y así se mantuvo en servicio hasta octubre de 1986, en que vendido para desguace, siendo desmantelado entre enero y marzo de 1987, a manos de Desguaces del Guadalquivir, muy cerca de donde había nacido a la mar.

Los buques “Villablanca” y “Villafría” también fueron al desguace y el buque “Villafranca” pasó en 1986 a Naviera Guadiaro. En 1988 fue vendido a Elmore Investment Corp. y rebautizado “Calao Reefer”. A finales de 1992 se hundió cuando navegaba a unas 300 millas al WSW de Freetown.

Fuente:puentedemando.com