El bote en el que viajaba naufragó como consecuencia de las malas condiciones del mar. La otra persona con la que navegaba continúa desaparecida.

En un incidente que recuerda lo implacable que puede ser el mar, un joven de las Islas Salomón enfrentó una dura prueba de supervivencia en el océano Pacífico Sur. Mientras viajaba en un bote junto a un hombre de 54 años, ambos fueron sorprendidos porlas inclemencias del tiempo. El viaje, que había comenzado en Honiara, la capital del archipiélago, se tornó dramático cuando las condiciones del mar empeoraron. El bote en el que viajaban no pudo soportar el embate de las olas, y en cuestión de momentos, ambos quedaron a la deriva en las agitadas aguas.

La historia de supervivencia del joven de 25 años se convirtió en un acto de resistencia y tenacidad en uno de los entornos más hostiles del planeta. Tras el hundimiento de su bote, el joven vació un bidón de gasolina y lo usó como un flotador improvisado, lo que le permitió mantenerse a salvo en el mar. A lo largo de 24 horas, soportó las olas, el frío de la noche y la incertidumbre de si alguien lo encontraría. La capacidad de adaptarse rápidamente a la situación fue clave para su supervivencia, aferrándose al contenedor como su única esperanza de salir con vida de la tragedia.

Finalmente, su lucha fue recompensada cuando los residentes de la aldea de Kuila, ubicada a más de 30 kilómetros al noroeste de Honiara, lo avistaron. Los aldeanos, al percatarse de su presencia, no dudaron en prestarle ayuda y lo rescataron de su precaria situación. El joven, extenuado pero vivo, fue llevado a tierra firme, donde recibió la atención necesaria tras su odisea en el mar.

Un desaparecido

A pesar del rescate del joven, la tragedia no había terminado del todo. El hombre de 54 años que lo acompañaba en el bote seguía desaparecido en el océano. Las autoridades de las Islas Salomón, preocupadas por su paradero, lanzaron un llamado urgente para intensificar la búsqueda. La Policía Real de las Islas Salomón, en voz del inspector George Mouli, instó a los capitanes de barcos y viajeros a estar atentos y a colaborar en la localización del hombre desaparecido.

Además del operativo de búsqueda, las autoridades también aprovecharon el incidente para emitir un recordatorio a los navegantes locales. La policía subrayó la importancia de tomar precauciones adicionales al navegar en condiciones de mar agitado, instando a que se aseguren de tener los equipos de seguridad adecuados y de informar sobre sus trayectos antes de zarpar. Este trágico episodio ha dejado una clara advertencia sobre los peligros del mar y la necesidad de estar preparados para enfrentarlos.

Fuente:infobae.com